Región de La Araucanía realizó capacitación sobre convivencia escolar y regulación emocional para educadores y artistas
El 25 de septiembre, el Museo Ferroviario de Temuco fue escenario de la segunda jornada de capacitación dirigida a artistas y educadores de la región. Esta actividad forma parte del Proyecto Piloto de Revitalización Identitaria en Culturas Originarias para la Niñez en La Araucanía, promovido por la Sección Regional de la Subdirección Nacional de Pueblos Originarios.
Durante la jornada, María Paz Ramírez, docente de educación básica y especialista en meditación y regulación emocional, lideró el taller titulado “Convivencia Escolar y Regulación Emocional”. En esta sesión, abordó la dinámica de trabajo con grupos de niños, centrándose en la gestión de situaciones de convivencia y ofreciendo diversas herramientas para enriquecer la labor pedagógica.
“Nuestro objetivo fue crear un espacio de reflexión sobre la convivencia escolar, donde pudimos observar nuestras capacidades y explorar cómo podemos contribuir desde nuestras experiencias. Al mismo tiempo, se invitó a los educadores participantes a reflexionar y adquirir estrategias que les permitan gestionar tanto sus emociones como las de sus estudiantes en este proceso”, comentó María Paz.
Entre los asistentes, Eliecer, artista educador de la Escuela San Pedro Rapa, expresó su agradecimiento por la continuidad de estas capacitaciones. “En una región donde existen diversas culturas, es fundamental fomentar una buena convivencia. Trabajar en función de las necesidades de los niños es esencial, y esta actividad nos proporciona herramientas prácticas que podemos aplicar en nuestras aulas”, afirmó.
Por su parte, Jairo Troppa, coordinador del proyecto señaló que esta estrategia integral busca no solo enriquecer la práctica educativa, sino también fomentar un entorno más saludable y acogedor para todos los involucrados: “A través de iniciativas como esta, abordamos uno de los pilares fundamentales del proyecto. Nuestro enfoque está en equipar a los artistas educadores con herramientas que les permitan gestionar eficazmente las situaciones que puedan surgir en el aula, siempre desde una perspectiva de derechos”.
De este modo, el proyecto se fortalece a través de estas jornadas, enfocándose en la regulación emocional y la optimización de la convivencia en el aula, con un impacto significativo en tres áreas clave: las niñeces, la institución educativa y los formadores.